La rutina diaria nos va llevando a acortar las horas que le dedicamos a nuestros seres queridos.
Debemos tomar la actitud seria para compartir tiempo en familia, colocándole a ellos la etiqueta de "prioridad".
Formas de encontrar momentos para disfrutar a la familia
Hoy, las horas parecieran ser más cortas que antes. Ni bien comenzamos el día, sentimos que el tiempo pasa a una velocidad estrepitosa, y que nunca nos alcanza para hacer todo lo que quisiéramos, ni lo que necesitamos o debemos hacer, incluso las tan esperadas vacaciones en las que viajamos para relajarnos se hacen mucho más cortas.
Y, claro, debido a ello solemos priorizar los pendientes y las tareas, restando el tiempo de convivencia familiar. Y esto no es ni adecuado ni conveniente, en particular cuando tenemos hijos pequeños que requieren de nuestra presencia, y que necesitan imperiosamente nuestra compañía.
Pero hay algunas cosas que podemos hacer para compartir tiempo en familia, y volver a pasar buenos momentos con ellos sin dejar tareas pendientes. Se trata de dar un orden a nuestras labores, de asignarles prioridades, y de estructurar un poco nuestro tiempo, para hacerlo rendir al máximo posible.
Consejos para disponer de más tiempo
Ya que no podemos ampliar las horas del día, debemos saber aprovecharlas. Aunque podamos hacer tareas múltiples, dedicando el tiempo a más de una actividad a la vez, debe tratarse de actividades compatibles.
El tiempo compartido con nuestros hijos debe ser tiempo de calidad, en el que podamos dedicarles nuestra atención, podamos conversar y escucharlos con atención, sin restar importancia a sus opiniones e intereses.
Es decir, por ejemplo, podemos realizar alguna tarea manual sencilla mientras dialogamos con nuestros hijos, siempre y cuando nuestro foco de atención permanezca con ellos.
Podemos dedicar tiempo para compartir con la familia si les damos al menos una tarde, o algunas horas a la semana, de manera exclusiva. Organice sus tareas, elimine los pendientes y urgentes de su lista de labores, y reserve este tiempo nada más que para tus hijos y su pareja. Pueden jugar juegos de mesa, dialogar o realizar alguna tarea en conjunto, demostrando un genuino interés por compartir con quienes más ama.
Si el reloj no le da pausa, intente incluir a los niños en sus actividades diarias. Por ejemplo, pídales que lo acompañen a hacer las compras, y así van a poder compartir recorriendo las góndolas.
En el viaje a la escuela o a la guardería, aproveche para compartir con ellos: que no se trate solamente de lo malo que es el tránsito ese día y de todo lo que tiene por hacer en la jornada. En lugar de ello, aproveche para charlar, o jugar juegos de carretera simples.
Lo importante es aprovechar cada momento que puedas, y dedicar tu atención en ello. Además de marcar de manera significativa los buenos recuerdos de sus hijos, esto te va a permitir tomar un respiro de las obligaciones laborales y personales ajenas a la familia.
Y cuando ese ritmo de vida vaya disminuyendo y haciéndole el espacio necesario a su familia, dedíquele tiempo a viajar a algún lugar para tomar unas merecidas vacaciones, puesto que también el resto de la familia necesita un esparcimiento de vez en cuando.
Consulte a su aerolínea favorita, programe su vuelo y tomen esas merecidas vacaciones, incluso haciendo vuelos a Guatemala para ahorrar más tiempo.